Wednesday, June 15, 2011

LA AMÍGDALA CEREBRAL.

    Una vez que el OVN se activa de manera cuasi-permanente, por diversas concausas, en mayor o menor medida, nos encontramos que la información así procesada, automáticamente se envía a la amígdala cerebral. La amígdala como centinela, automáticamente percibe una señal que le envía el OVN con carácter de urgencia, probablemente a su zona central que es en la que se focalizan los olores y los mensajes viscerales. Esta señal, elude el neocortex, y se recibe directamente y, como tal, se procesa desde la amígdala  una respuesta inmediata que incide en el Sistema Nervioso Central.

   Paradójicamente la zona lateral de la propia amígdala, que se encarga de procesar la información procedente del tálamo y del neocórtex visual y auditivo, están recibiendo señales de tranquilidad, de ausencia de cualquier peligro. Por tanto, entran en clara colusión, a la hora de transmitir información al Sistema Nervioso Central, el núcleo lateral de la amígdala con el central. Respecto a la zona  corticomedial o parte de la amígdala encargada de procesar los olores, posiblemente se encargue de procesar la información procedente del Sistema Olfatorio Principal y no la enviada directamente del OVN.

  En definitiva, se residencia en la amígdala cerebral una absoluta contradicción de la información recibida,procesada y posteriormente emitida, en su consecuencia errónemente  las diversas partes del cuerpo, por medio del Sistema Nervioso Central.

   Estamos en disposición de afirmar que el OVN, se activa involuntariamente, emite una información urgente y errónea a la amígdala cerebral y, ésta mal informada, a su vez, emite una respuesta incorrecta la resto del cuerpo  a través del Sistema Nervioso Central y, de otro lado, entra en constante contradicción con la información procesada en su zona lateral, que se la presupone mejor y más informada, por cuanto procede del neocórtex.

No comments:

Post a Comment